La terapia con ventosas (también conocida como descompresión miofascial) se remonta a las antiguas culturas china, egipcia y del Medio Oriente. La técnica incluso se describe en uno de los libros de texto médicos más antiguos del mundo, el Papiro de Ebers., lo que significa que los antiguos egipcios pueden haber estado usando la terapia de ventosas ya en 1550 aC
En la terapia con ventosas, el terapeuta coloca copas (que pueden estar hechas de vidrio, bambú, loza o silicona) sobre la piel y aplica succión, lo que atrae el tejido hacia las copas. Este proceso puede dejar hematomas circulares en el cuerpo.
Esto es lo que le sucedió al nadador profesional Michael Phelps, quien usó la terapia con ventosas durante los Juegos Olímpicos de 2016. Sus moretones eran visibles en la cámara, lo que generó muchos comentarios en las redes sociales y muchas personas aprendieron sobre la terapia con ventosas. Aunque las ventosas dejan moretones en el cuerpo, generalmente desaparecen después de 7 a 10 días.
Las ventosas pueden ser beneficiosas para muchos problemas, que incluyen:
- aliviar el dolor
- Reducir la tensión muscular
- Aumentar un rango de movimiento limitado
- Aumentar el oxígeno en áreas locales debido al aumento del flujo sanguíneo local
- Reducir la inflamación
- Aumento del flujo sanguíneo
Quitando el estancamiento
Una vieja máxima china dice que “donde hay estancamiento, habrá dolor. Elimina el estancamiento y eliminarás el dolor”.
Esto es exactamente lo que las ventosas buscan abordar. Al eliminar la obstrucción, las ventosas alientan al cuerpo a curarse y regenerarse.
Algunas personas se preocupan de que usar una taza como aspiradora en la piel sea doloroso, pero la sensación se puede comparar con un pulpo amigable. En otras palabras, se siente como una presión de ligera a media.
La terapia con ventosas es muy segura y cualquier evento adverso es raro y generalmente varía de leve a moderado. Estos efectos pueden implicar sentirse mareado, con náuseas o sensible alrededor del área tratada.
Las ventosas también se consideran generalmente prohibidas para las personas con insuficiencia orgánica, pacientes con cáncer, personas con marcapasos o personas que padecen hemofilia o afecciones similares. Si tiene una quemadura de sol, una infección, algunas heridas abiertas o una enfermedad crónica grave, como una enfermedad cardíaca o anemia, es posible que las ventosas no sean el mejor método de tratamiento para usted. Por último, si estás embarazada, debes evitar usar copas en el abdomen o la espalda baja.
Una alternativa valiosa
De lo contrario, las ventosas se pueden usar como una forma de tratamiento para muchos tipos diferentes de problemas y pueden ser una alternativa valiosa para personas de todos los ámbitos de la vida.
Si usted es alguien que está experimentando dolor musculoesquelético y rigidez, un atleta que ha entrenado demasiado o un ejecutivo que necesita aliviar el estrés, las ventosas pueden optimizar el rendimiento deportivo, acelerar la recuperación, estirar los músculos y el tejido conectivo, mejorar el bienestar general y mucho más.
Para obtener más información sobre las ventosas o reservar una cita, encuentre una clínica cerca de usted y reserve en línea.
Este blog apareció originalmente en Lifemark.ca.